Ahora que se acercan las fiestas decembrinas empezamos a desempolvar los villancicos tradicionales y modernos para acompañar nuestras fiestas con música navideña. Una de las más importantes festividades del cristianismo es justamente la Navidad, celebrada desde el año 350. Sin embargo, el origen de los villancicos no estaba ligado a la Navidad en un principio.
Este artículo ha sido escrito por "somoremusic".
Sabemos que su origen se remonta desde la Edad Media y el Renacimiento, con canciones populares de España y Portugal. Mientras unos afirman que los primeros villancicos fueron creados por los evangelizadores del siglo V, otros mencionan que el primero en componer música de este tipo fue el Marqués de Santillana.
Los villancicos deben su nombre a la palabra "Villanos" que quiere decir “gente del Pueblo”. Se trata a menudo de canciones interpretadas por el pueblo para contar historias de diferentes temas sociales. En general, se trata de composiciones vocales inspiradas en textos de temática rural, que no siempre iban acompañadas de instrumentos.
Desde que estas letras tuvieron gran éxito buscaron su musicalización con grandes compositores del momento, como el músico y poeta Juan del Encina, Mateo Flecha o Gaspar Fernandes, entre otros.
Los villancicos eran uno de los tres principales géneros de la lírica española popular, junto con las cantigas y las jarchas mozárabes. A través del tiempo, se recogió una parte de los villancicos en manuscritos y volúmenes antológicos, conocidos como Cancioneros. Entre ellos destacan el Cancionero General, el de Palacio, el de Linares, el de Medinaceli, el de la Colombina o el de Upsala.
Por su parte, la iglesia notó en estas canciones una fórmula perfecta para difundir su mensaje. Así que no tardaron en alentar la producción y la escritura de villancicos inspirados en la figura de Jesucristo y de la Virgen. Además, se extendió también el recurso de sustituir la letra profana por una sagrada. Este éxito llevó a oficializar y a permitir la interpretación de aquellos villancicos de temática religiosa. Poco a poco se volvieron parte misma de la liturgia.
En la actualidad, los villancicos no son exclusivos de España o Portugal. Hay temas que han surgido en diferentes partes del mundo y han obtenido reconocimiento mundial
Compartimos una lista de los más populares.
Se le atribuye al estadounidense James Lord Pierpont en 1850. Sin embargo, hay musicólogos que siguen debatiendo la veracidad de este dato.
Interpretado por primera vez en un pueblo pesquero de Austria, durante la misa de gallo celebrada en 1818. El sacerdote Joseph Mohr escribió esta pieza que se ha traducido en 330 idiomas.
Proveniente de la Inglaterra del s. XVI y de autor desconocido.
Es un villancico escrito por el compositor Irving Berlín en 1940. Ha sido traducido a 25 idiomas.
Se atribuye la autoría a la pianista norteamericana Katherine Kennicott, al traducirlo al inglés de un supuesto original checo en 1941.
Escrita por el francés Adolphe Charles Adam en 1847.
Es uno de los villancicos más populares en distintos países. Sus inicios y autoría no están muy definidos, pues solo se ha documentado que su origen es andaluz (en la costa sur de España) y se creó desde principios del siglo XX.
Compuesto por el músico venezolano Hugo Blanco en 1975.
Se desconoce el origen, pero se puede notar la influencia árabe.
Nació en el siglo XVIII, se cree que es de origen español, y de autor desconocido.
Al paso del tiempo, la forma de hacer villancicos también evolucionó. Ahora es casi muy común que se toquen instrumentos y pasaron a ser canciones pop muy bellas que no pueden faltar en las festividades. A pesar de esta evolución, lo importante es que no se pierda la tradición y que sigan presentes en estas fechas. Deben cumplir su noble cometido: alegrar y mantener el espíritu navideño.
Sigue pendiente de nuestro siguiente artículo, en él enlistaremos las canciones más populares que se convirtieron en un clásico de estas fechas. Mientras, lee otros artículos relacionados con el mundo de la música: